Y DESDE CENICIENTOS HASTA CADALSO.
Aunque en principio se había programado esta actividad para el mes de febrero, otras actividades y las previsiones del tiempo nos hicieron retrasarla hasta el 11 de abril, pasada ya la Semana Santa.
Para nosotros resultaba muy importante la participación de algunos amigos y simpatizantes de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago en Cadalso de los Vidrios que son de Cenicientos o viven en esta vecina localidad; pues su colaboración era vital para no confundir ningún camino y poder así dar una buena información y señalización al peregrino. Desde un primer momento Javier Vedia nos ofreció su colaboración y de él dependía el trabajo realizado en el día de hoy.
Puntuales a la cita acudían Ángel Sánchez, Richard Pickers, Eloy del Pozo y yo, aunque sólo para entregarles los materiales de pintura pues hasta las once y media no podría sumarme a las tareas del grupo. Emprendieron los tres su marcha a Cenicientos tras quedar con Javier Vedia, con el que se desplazaron hasta Paredes de Escalona para iniciar allí el pintado de flechas amarillas que caracteriza a todos los Caminos con destino a Santiago.
Con el apoyo de un todoterreno, a veces por el propio camino, a veces por la carretera, se fueron pintando flechas en aquellos puntos en los que podría surgir alguna duda sobre el camino a seguir: encrucijadas, desvíos, cambios en la tipología del camino, ...
El recorrido por caminos evita al peregrino los peligros de las carreteras, en general estrechas y sin arcén, aunque le enfrentan a nuevas dificultades como la presencia de charcos aparentemente insalvables, el molesto barro que se adhiere al calzado, las zarzas y otros tipos de vegetación que a veces tapan y cubren los caminos, el suelo pedregoso y a veces la soledad y el rechisol de los caminos sin abrigo.
Buscamos la seguridad y el confort del peregrino pero cada terreno es como es y no podemos cambiarlos. Nosotros también disfrutamos al recorrerlos y al marcarlos pensando en los caminantes y peregrinos que vendrán detrás.
Cada camino ofrece, además, su propia belleza, sus sorpresas, sus vistas, sus estampas,... y a nosotros nos gusta disfrutarlas y compartirlas.
Cuando llegué a Cenicientos en torno a las once y media, salí al encuentro de los que venían desde Paredes, me dijeron que ya habían pasado el puente romano y que estaban muy cerca de Cenicientos pues veían ya algunas construcciones. Nos juntamos y decidimos marcar también el recorrido entre Cenicientos y Cadalso por el Camino Viejo.
Subidos en los coches atravesamos el pueblo, pintamos una sola flecha casi en la salida y llegamos luego hasta el camino de la Peña Buvera o Peña de Cenicientos. Al otro lado de la carretera sale un camino que se hunde en el valle y que también estaba sin señalar. Aquí nos hicimos algunas fotos y nos despedimos de Javier Vedia. Gracias compañero, gracias amigo.
El descenso al principio es muy pronunciado pero el camino es amplio y puede hacerse bien en bicicleta, salvo en época de lluvia que será más cómodo por la carretera. Además este camino acorta la distancia que hay por carretera.
Ya desde el inicio de este camino disfrutaremos de las vistas que podemos contemplar de la Peña Muñana y de Cadalso, en una mañana soleada y agradable, sin lluvia a pesar de algunas predicciones y que amaneció fría (cuatro grados a las 8,45).
Pronto empezamos a oír el arrullo del agua, del arroyo que baja desde la presa y que parece ir un buen trecho paralelo al camino, luego lo cruza por encima (no hay puente) y como es lógico el camino se encharca. Logramos pasar sin muchas dificultades por uno de los margenes y pensamos en algunas maneras de mejorar este paso.
Encontramos también dos repechos, unas cuidadas viñas, una frescura del campo y un colorido que nos permiten disfrutar casi todo el camino. Intentamos marcar lo menos posible, ser lo menos agresivos posibles con el medio natural, respetando paredes y vallas de dueños a los que no conocemos, ... aunque alguno parecía disfrutar mucho pintando.
Entre fincas de personas conocidas de Cadalso, huertos cuidados con esmero, conversaciones con algunos vecinos sobre el estado de los caminos y sobre el Camino de Santiago, llegamos a la carretera del Pilar, donde comprobamos la decoloración que sufren las antiguas marcas por el sol y las inclemencias del tiempo.
Si nos descuidamos nos pinta la peña. |
Claro, que la foco tiene truco, aquí parece quere pintar la nube. |
Y cuando le reprenden para que no pinte la Peña......... |
... se vuelve y quiere pintar el objetivo de la cámara. |
Eloy en tareas de limpieza del camino. |
Mirando la Peña Muñana |
Mirando la Peña Muñana descompensadamente |
Texto: Javier Perals.
Precioso reportaje. ¡Qué fotos tan bonitas!
ResponderEliminarY encima lo pasamos estupendamente. Esto es disfrutar de lo que tenemos: Camino, paisajes y amistad. Gracias Miguel.
ResponderEliminarYo siempre he dicho que desde la Peña se divisa media España, desde los Caminos de Santiago
ResponderEliminarque estamos haciendo lo estoy confirmando.
Ángel (Canillo)
Yo siempre he dicho que desde la Peña se divisa media España, desde los Caminos de Santiago
ResponderEliminarque estamos haciendo lo estoy confirmando.
Ángel (Canillo)
Bueno Ángel, tanto como media España ........ Lo que sí es cierto que nuestra Peña se ve desde las dos Castillas y desde Madrid (que son tres regiones autonómicas), y que casi siempre esas vistas son maravillosas. Cuando hacemos los Caminos disfrutamos y eso me parece importante. Un abrazo Ángel. Javier.
ResponderEliminarComentario que nos llega a través del correo electrónico de Alcazar:
ResponderEliminarMuy buen artículo sobre Villuga. También excelentes fotos. Os felicito a todos los que habéis colaborado en el tema del blog.
Gracias Salvador, los que nos seguís, los que hacéis comentarios, los que os dais una vuelta por el blog a ver si hay novedades nos animáis a que sigamos trabajando por Cadalso, por el Camino de Santiago y por esta Asociación. Javier.
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