EL VIDRIO EN ESPAÑA
El vidrio fue el gran secreto, símbolo de lujo y poder de
la realeza europea.
El vidrio, en la Península Ibérica
medieval, está documentado desde el año 1479 en Cadalso de los Vidrios por el
geógrafo de Carlos III, Tomás López.
En el marco legal
afectaba a la producción del vidrio útil, no existiendo ordenanza para el
vidrio de lujo
Durante los siglos
XV y principios del XVI la producción del vidrio se realiza bajo el reinado
de los Reyes Católicos. Isabel la
Católica concede privilegio a los frailes en los Toros de
Guisando para un horno de vidrio en el año 1475.
Carlos V en 1548
trata preservar la importancia del vidrio Castellano, tratando de frenar la
importaciones de vidrio del extranjero.
Felipe II, se
servia de Venecia, los famosos vidrios de murano. Propició poner vidrios en los Palacios del Pardo, Aranjuez, y
El Escorial.
Los Marqueses de
Villena, construyen: El Palacio y la
Iglesia de Cadalso y el Monasterio de Guisando y la primera fábrica de
vidrio que hubo en Cadalso (s. XVI).
Las fábricas de vidrio de nuestro pueblo, a lo
largo de la Edad Media, desde finales del siglo XV y durante los siglos XVI y XVII se convierten en uno de los centros punteros de la Península.
Los centros
vidrieros, se ponen cerca de buenos caminos, (Camino de Santiago, Camino del
Levante Sureste, desde Murcia, Alicante, Valencia, Granada y Ciudad Real,
Toledo el paso es por Cadahalso), y grandes masas forestales (Leña),
yacimientos de materias primas fundamentales (Arenas y plantas quenopodiáceas)
y con agua abundante. Cadahalso reune todas estas características.
En el año 1479 se tiene constancia de que existía una
fábrica de vidrio en Cadahalso. Cadalso de los Vidrios,
con su nombre hace honor a los 444 años que estuvo haciendo vidrio en sus seis grandes fábricas:
Las fábricas surtieron a buena parte de Castilla y resto de
España, hasta que en el año 1923 se cerraron. Este hacer de los cadalseños vidrieros
es lo que quiero plasmar en este libro. En el suelo de su campo, se encuentran
esparcidos por los siglos, los trozos de vidrio y crisoles de sus fábricas.
Hoy podemos admirar los vidrios en algunas casas del pueblo
que en su día hicieron posible nombrarle así, y que han pasado de padres a
hijos, igualmente en museos de España y Europa. En los anales de los archivos y
bibliotecas se ven los escritos haciendo referencia a este arte cadalseño.
Igualmente podemos decir de las piezas
en museos.
Este pueblo, cuyo nombre es bien
conocido por los amantes de la tradición vidriera, ha guardado siempre su buen nombre y su fama.
Del libro VIDRIOS DE
CADALSO. Por Ángel Sánchez Moreno (Canillo) Pág. V. 1 y 2.
Se puede ver en la
Biblioteca de Cadalso de los Vidrios.
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