PATROCINADORES 2023-1

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La Asociación de Amigos del Camino de Santiago en Cadalso de los Vidrios agradece su colaboración a todos nuestros PATROCINADORES. Muchas Gracias.

PATROCINADORES 2023-2

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MAPA DE METRO DE LOS CAMINOS DE SANTIAGO

MAPA DE METRO DE LOS CAMINOS DE SANTIAGO
FEDERACIÓN DE ASOCIACIONES DEL CAMINO DE SANTIAGO LEVANTE-SURESTE

MAPA FOLLETO

MAPA FOLLETO
MAPA DEL CAMINO DEL SURESTE A SU PASO POR LA PROVINCIA DE MADRID, DESDE ESCALONA A CADALSO Y DE CADALSO HASTA CEBREROS, CON FOTOS DE LUGARES SINGULARES DE TODAS LAS POBLACIONES.

INFORMACIÓN FOLLETO

INFORMACIÓN FOLLETO
CARA DE INFORMACIÓN DEL MAPA DE LAS ETAPAS DEL CAMINO DEL SURESTE A SU PASO POR LA PROVINCIA DE MADRID ENTRE ESCALONA (TOLEDO) Y CEBREROS (ÁVILA) CON INFORMACIÓN DE LOS RECURSOS EN LOS DISTINTOS MUNICIPIOS. ESTE FOLLETO HA SIDO EDITADO POR LA ASOCIACIÓN DE AMIGOS DEL CAMINO DE SANTIAGO EN CADALSO DE LOS VIDRIOS CON EL PATROCINIO DE LA CONSEJERÍA DE TURISMO DE LA COMUNIDAD DE MADRID. AGRADECEMOS AL AYUNTAMIENTO DE CADALSO SU COLABORACIÓN.

viernes, 28 de marzo de 2014

CADALSO DE LOS VIDRIOS - SANTIAGO DE COMPOSTELA (RUTA EN BICICLETA)

Aprovechando que ya estamos en primavera, es buen momento, para presentaros a mis queridos peregrinos, la ruta que hizo nuestro amigo Ricardo Rosado y que tan amablemente nos la paso para que pudieran disponer y disfrutar de ella toda persona interesada.
Es una ruta en bicicleta de  Cadalso a Santiago, en su cuaderno de ruta viene detallada y bien ilustrada, etapa por etapa.
Es todo un lujo contar con esta ayuda, ya está todo hecho, solo falta subirse a la bicicleta y pedalear, espero que os animéis.
Ricardo partió de Cadalso el 23 de junio de 2011, sin más compañía que su bicicleta, su mochila y una enorme ilusión.
  • 1º etapa fue de Cadalso a Gotarrendura con una duración de 87,5 Km.
  • 2ª etapa Gotarrendura a Toro, duración 121 Km.
  • 3ª etapa Toro a La Bañeza, duración 123 Km.
  • 4ª etapa La Bañeza a Cacabelos, duración 101 Km.
  • 5ª etapa Cacabelos a Samos, duración 77 Km.
  • 6ª etapa Samos a Palas de Reí, duración 60,9 Km.
  • 7ª etapa Palas de Reí a Santiago de Compostela.


Yo he querido hacer una mera reseña del camino de Ricardo, pero en el siguiente enlace podrás disfrutar con todo lujo de detalle las etapas día a día, espero que las disfrutéis y que os anime a realizar la misma ruta.
María Cruz García



martes, 11 de marzo de 2014

EL ENIGMA DE PIEDRA ESCRITA

PIEDRA ESCRITA

     A unos 80 km de Madrid se encuentra la villa de Cenicientos, que guarda uno de los enigmas arqueológicos más interesantes de la provincia. Más o menos así iniciaba su artículo reportaje Miguel A. Martínez Artola en la revista Historia 16 de noviembre de 2000. Se está refiriendo al enigma de Piedra Escrita.
Cenicientos desde la Peña Buvera.

     “Olvidada por el sobrecogedor bagaje cultural madrileño, mutilada y solitaria, se yergue a las afueras del municipio, desafiando al tiempo, la indigencia y la ignorancia. Se trata de un monolito de unos 7 metros de altura y unas 20 toneladas con relieves en hornacina sobre cuyo origen y significado se especula desde hace tiempo. Este monolito constituye el resto más antiguo y venerable de la historia de la villa.”
Piedra Escrita, ¿altar, monumento de agradecimiento por una sanación, límite provincial romano?

     Las huellas romanas de Cenicientos se centran en dos monumentos: el monolito de Piedra Escrita y en el puente sobre el arroyo de los Molinillos, además puede haber un tercero, es una calzada roma con piedra a modo de losas que cubre parte del camino, creo que era el llamado camino de Escalona que unía Cenicientos con Paredes de Escalona.
Puente Romano de Cenicientos. Foto de la web cenicientos.net

      En un artículo publicado por D. Antonio Box María Cospedal en la revista Cisneros el 24 de octubre de 1980 escribe: “la ornamentación de la piedra corresponde más bien a saliente.   Consiste en un encasetonado de forma abovedada, en cuyo fondo hay una escena labrada en altorrelieve, enmarcada en un rectángulo de 1,40 metros de lado.   

     Muestra tres figuras humanas, de varones, de perfil, poco erosionadas, perfectamente hechas, que representan a tres romanos vestidos con togas largas, de aspecto aristocrático, de pie. Los bellos pliegues del ropaje muestran la habilidad plástica del cantero-escultor que las hizo. La toga era la vestidura civil de los romanos de entonces, hace veinte siglos.   En medio de las tres figuras se aprecia una mesa o altar votivo. La figura de la izquierda posa su mano izquierda sobre dicha ara y las otras dos figuras a la derecha, hermanadas, posan en el ara, la primera su mano derecha y la segunda su mano izquierda.   

      El conjunto da la impresión de ser el testimonio de un pacto, por superposición de cada una de las manos citadas de los tres personajes, según uso habitual, en este acontecer.   Debajo de la escultura descrita queda la huella cuadrangular apaisada de 1,40 metros por 0,75 metros, correspondiente a una lápida explicativa “escrita” que debió de existir, expoliada, Dios sabe cuándo.

     Conviene llamar la atención sobre unos orificios, no demasiado profundos, a la altura de estas dos partes diferenciadas, el grabado superior y la posible losa o estela explicativa. También es curioso el enmarcado del conjunto con una bóveda semicircular a modo de hornacina.
Dibujo realizado a partir de fotografías realizadas por Alicia Cantó
Inscripción latina antigua cristianizada ya en la Edad Media.

      Al lado izquierdo aparece una inscripción que fue transformada de los caracteres latinos a una inscripción dedicatoria “A las tres Marías”, para cristianizar el monumento posiblemente en época medieval. La arqueóloga de la Universidad Autónoma de Madrid, Alicia Cantó, descifró el posible mensaje latino que subyace bajo esta dedicatoria: A.L.S.SISC Q DUANAE, iniciales de las palabras que forman el siguiente mensaje: “Animo Libem Solvit Siscinius Q. Duanae” y que quieren decir: “Sisquinio Q. (posible apellido) cumplió su promesa de buen grado ante Diana”. 

     Esta profesora determina que de los tres personajes, el de la izquierda, más digno, puede ser Diana, diosa de la fertilidad y protectora de los dolores de parto. A la derecha, juntos, una pareja formada por un hombre y una mujer. A los pies una vaca y un cabrito, dos de los animales que representan a la divinidad. 





      Respecto a los cuatro agujeros laterales Alicia Cantó asegura que se trata del lugar donde se sustentaba un tejadillo colocado en época medieval para servir de refugio a pastores.

     En la parte posterior de la piedra aparecen toscamente labrados unos pasos o peldaños que permiten acceder a la parte superior del monolito, aunque se desconoce si se hicieron con alguna intención ritual o para hacer sacrificios.
  

 Javier Perals.
Para saber más

domingo, 9 de marzo de 2014

PASEO A PIEDRA ESCRITA

PASEO A PIEDRA ESCRITA

            Para llegar a Piedra Escrita nos desplazaremos en vehículos desde la gasolinera de Cadalso hasta el final de la carretera del Pilar, donde se junta con la carretera que une Almorox con Cenicientos. Y por donde llega el Camino de Santiago del Sureste procedente de la localidad de Paredes de Escalona. También se junta aquí la cañada Real. En este punto, apartando los coches de la carretera, dejaremos los vehículos y haremos el recorrido andando.


            Para los buenos caminantes cabe la posibilidad de hacer este tramo andando, aunque madrugando más para salir más temprano, y tratar de acogerlos en los coches a la vuelta.
Con las lluvias de febrero el camino y las zonas áridas circundantes se han llenado de pastos y charcos.

Ya sé que sólo son hozadas de jabalíes, pero me gusta pensar que también a ellos les gusta venir por aquí.


            Desde aquí iremos andando, tomando la carretera de Almoróx a Cenicientos con destino a esta última localidad. Apenas a 200 metros de este cruce veremos salir un camino a la izquierda que en seguida comienza a descender buscando los ricos prados. Bordean el camino encinas, algunas con buen porte, enebros (juniperus oxycedrus o enebro de la miera), retamas blancas (dan flores amarillas) y algunos espinos blancos y en algunas zonas más pedregosas la jara pringosa. Según vayamos acercándonos a nuestro destino aparecerán higueras y olivos.
Algunas encinas parecen emerger de las propias piedras.

Uno de los enebros al borde mismo del camino.

En la parte baja perviven algunas viejas higueras.


            A poco más de un kilómetro se encuentra el lindero de una finca con unas cuidadas cepas, trataremos de ir por el margen derecho de la viña procurando no dañar las cepas ni pisar en exceso el terreno labrado. Apenas 100 o 200 metros más adelante encontramos erguida una curiosa piedra en la que aparecen unos orificios laterales que bien podrían servir para encajar listones o tablas que hicieran de límite o de entrada a algún recinto. Personalmente al llegar aquí siento entrar en un lugar envuelto en la magia y el misterio.
¿Será esta la entrada a la zona mágica de Piedra Escrita?

La piedra antes desnuda, ahora colonizada poco a poco por los líquenes, era un secadero de higos.


            Muy próximo hay una lancha de granito que hasta hace bien poco aparecía completamente desnuda y limpia, en la actualidad empieza a ser colonizada por líquenes. El misterio de la piedra es que sirvió de secadero de higos (veremos algunos más en las proximidades) y cuando se retiraban los higos ya secos parte del azúcar de la fruta impregnaba la roca, lo que atraía a mil pájaros que impedían el arraigo de cualquier liquen o musgo.
Majestuosa, impresionante, así vemos Piedra Escrita desde nuestro sendero.


            Apenas dejamos esta piedra giramos hacia nuestra izquierda bordeando un pequeño cerro y  a escasos 100 metros aparece erguida la Piedra Escrita.

¿Época romana o época medieval?
           Contemplaremos el lugar con un absoluto respeto al grabado y a todo el entorno, podemos atender a las explicaciones que se nos den del monolito y del motivo por el que se labró y tras asegurarnos de no dejar desperdicio alguno en el lugar nos desplazaremos hacia el noreste por los linderos de la finca para ir en busca de al menos una de las 12 tumbas labradas en piedra que al parecer se encuentran diseminadas por aquel lugar.
Observando Piedra Escrita me pareció ver druidas por los cercanos bosques.

Desde luego alguien vivió por este lugar y lo dejaron descansar aquí.

A ver si el druida era mi perro, que creo que se lo pasó mejor que yo, y eso que yo disfruté la tarde.


          Desde aquí emprenderemos el camino de regreso.
Javier Perals



jueves, 27 de febrero de 2014

MIL VISITAS

MIL VISITAS
No hemos cumplido dos meses desde que abrimos el Blog de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago y ya hemos llegado en el contador de visitas al número mil. Lo he descubierto esta noche al hacer la entrada sobre el paseo a Piedra Escrita y ya sé que cada vez que hago una entrada, o una modificación, porque mira que he tenido que hacer modificaciones para corregir mis propios errores, salta un numerito.
Por cierto, uno muy gordo, es la ausencia del autor de la foto de nuestra portada, que es Jose María Díaz Rubio, socio y tesorero de nuestra asociación.
GRACIAS A TODOS.      Javier Perals

sábado, 15 de febrero de 2014

Monasterio de Guisando

MONASTERIO DE GUISANDO    FEBRERO DE 2014
El pasado 8 de febrero tuvo lugar la primera de las visitas al antiguo Monasterio de los Jerónimos de Guisando, concertadas por la Asociación. La meteorología adversa no fue obstáculo para la visita, que se desarrolló sin apenas lluvia e, incluso, con algún rayo de sol.
Toros de Guisando, Foto de nuestro archivo.
 A la hora prevista nos estaba esperando en los Toros de Guisando Julián, el guía, miembro de la familia propietaria de la finca, que nos facilitó el acceso en coche hasta la Cañada Real Leonesa, donde iniciamos el ascenso a las ruinas del Monasterio, la Ermita de San Miguel y la cueva de San Patricio, que se encuentran a media ladera del Cerro y desde donde se domina una vasta extensión de terreno.
 
El cerro de Guisando, sobre la cabeza del toro que aparece en medio, a media ladera, el Monasterio
Un vez en las puertas del recinto, y tras la foto de rigor, pudimos aprender datos de la historia del Monasterio, que se irían ampliando durante toda la visita y que resumiremos en otro post.
 
A la izda Julián, nuestro guía, y los "siete magníficos". Única foto que se hizo ese día.
Comenzó la visita por los jardines inferiores, donde hay restos diseminados de arcos, columnas y capiteles del claustro superior o “de Novicios”, además de un antiguo aljibe, usado como piscina. También está la piedra clave de la cúpula, con la unión de ocho nervios, de la ermita de San Miguel. Junto a los jardines, se conserva la fachada y paredes interiores de un edificio que se encuentra en plenas obras de consolidación.
 
Columna y arco en los jardines. Foto de una visita hacia 1998.
Bordeando la Casa de Legos, con su porche de columnas, y las paredes de sillares de la Iglesia, pudimos acceder a su interior por su preciosa fachada, comprobando como los arcos de piedras de la altísima bóveda de la nave aún resisten los embates del tiempo. Se conserva algún resto, como el púlpito y su escalinata interior de acceso.
 
Fachada norte y entrada. Foto de nuestro archivo.
Contigua a la Iglesia se sitúa el Claustro, que no está completo y en el que aún subsisten algunos elementos que denotan su antigua habitabilidad, como restos de las ventanas de la galería superior y radiadores de hierro en la parte inferior. Encima de la arquería hay grabados en piedra dos escudos del Monasterio. Debajo de este claustro hay un gran aljibe.
 
Arcadas del claustro. Foto de nuestro archivo.
A través de una antigua cocina, se accede al anteriormente mencionado Claustro superior o “de Novicios”, en el que pueden apreciarse los arranques de los arcos y una tumba de un obispo. En una puerta figura el escudo de los Marqueses de Villena y en otra, dos aspas de San Andrés (es curioso que siendo propiedad durante los últimos 130 años de una familia con título de nobleza, no exista un sólo escudo del mismo). Desde el claustro pasamos al antiguo Refectorio, techado con vigas de madera.


Finalizada la visita del Monasterio, emprendimos la subida a la Cueva de San Patricio, que hizo las veces de Ermita Rupestre, donde escuchamos el eco del goteo del agua de lluvia filtrada. La leyenda no se queda corta y dice que la cueva llega hasta Portugal.
  
Vista del claustro desde la ermita de San Miguel. Foto de nuestro archivo.
Desde aquí, pasando junto a las chimeneas de las cuevas pequeñas, ascendimos a la Ermita de San Miguel por unas escalinatas labradas en la misma piedra, que nos hicieron envidiar la solución para su acceso, y no la de las denostadas escaleras metálicas de nuestra Peña Muñana.
  

La Ermita, de planta cuadrada, también se encuentra destechada, con restos en el suelo de los nervios de piedra que sustentaban la cúpula. Se conservan en las esquinas los arranques de los nervios, cinco en cada una. En la puerta de entrada, de piedra bien labrada, figura el escudo orlado de los Villena. En otro arco interior de piedra, hay relieves de figuras florales que pudieran representar imágenes propias de alquimistas. A este respecto, conviene recordar que el primer Marqués de Villena sobresalió en Alquimia, Astrología y Matemáticas, lo que le valió fama de nigromante, y hechicero, y algunos afirman que en esta Ermita llevaba a cabo alguna de sus funciones.
Vista del Monasterio y la Iglesia desde la ermita de San Miguel. Foto de nuestro archivo.
 Contrasta lo basto de las paredes, una vez descubiertas de su revestido, con lo artístico de los arcos y la cúpula, así como de la ventana, flanqueada por dos banquitos de piedra. La vista que regala la ventana es impresionante: debajo el Monasterio; más allá, el llano de la Cañada y de los Toros de Guisando, donde en tiempos estaba la Venta y también una fábrica de vidrio; en la lejanía, San Martín de Valdeiglesias y las estribaciones de la sierra de Guadarrama. Hacia el sur, la Peña Muñana y, más cerca, el muro de la Iglesia de Navarredonda, que perteneció al Monasterio.
Inscripción en la venta juradera que hizo poner la Marquesa de Castañiza, sobrina de la marquesa que adquirió el monasterio el el último tercio del siglo XIX.
  La bajada hacia la Cañada, en amena conversación, nos permitió conocer más detalles de la historia del Palacio, como, por ejemplo, que fue cuartel de la Guardia Civil durante la época de los maquis, y que funcionó una escuela para los niños de los empleados. Allí nos despedimos de nuestro amable anfitrión y volvimos a coger los coches para regresar a Cadalso, tras tres gratísimas horas de visita al que fue Monasterio de San Jerónimo de Guisando.
Jose Luis de Acuña Reig.
Página web del Monasterio:    http://monasteriodeguisando.es/